lunes, 23 de noviembre de 2015

LA ASUNCIÓN DE LA VIRGEN

                                         




Este cuadro está creado de 1516 a 1518, época del barroco. Se produce la guerra anglo-española, siglo XVII. Es llamado el siglo de la física, ya que en este siglo las aportaciones de Galileo GalileiRene Descartes e Isaac Newton dieron origen a la física clásica y a un sistema de pensamiento mecanicista.
  
Es un cuadro renacentista. Sus características son que la pintura de esta época está relacionada con la idea de volver a la antigüedad clásica, y el impacto que tuvo el humanismo sobre artistas y sus patronos.

El autor de esta obra es el pintor renacentista italiano llamado Tiziano, quien fue uno de los mayores exponentes de la Escuela veneciana.Tiziano es uno de los más versátiles pintores italianos, igualmente capacitado para ejecutar retratos, paisajes (dos de los temas que le lanzaron a la fama). Podemos dividir su producción pictórica en tres grandes temas: la pintura religiosa, las escenas mitológicas y los retratos. Tuvo una larga y dilatada carrera, y su obra atravesó muchas y diferentes etapas, en las que su estilo cambió tan drásticamente que algunos críticos tienen problemas para creer que los cuadros de su primera etapa y los de las posteriores hayan salido de la misma mano.

Se trata de un óleo sobre madera de gran tamaño, pues alcanza los 6,90 metros de alto y 3,60 m de ancho.

El título de esta pintura es "La asunción de la Virgen", ya que la que está dibujada es la Virgen.

El tema de este cuadro es mitológico y religioso. Son obras llenas de colorido y luz, y también los personajes están en movimiento.

La pintura muestra distintos acontecimientos en tres capas. En la inferior están representados los Apóstoles, con los brazos levantados hacia el cielo, excepto san Pedro, cuyos brazos están cruzados. Miran a la Virgen María, vestida de azul y rojo, que está volando entre ellos, en pie sobre una nube y está rodeada  celebrando y bailando.
Junto a Dios, que la está esperando, hay un ángel sosteniendo la corona de la Gloria Santa.



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